La importancia de una sonrisa

La importancia de una sonrisa

Dicen que la sonrisa es el espejo del alma y la verdad, es que estoy totalmente de acuerdo con esta afirmación.

Podría decirse que muchas veces aun sin quererlo, reflejamos en nuestro exterior aquello que de alguna forma llevamos dentro.

Yo soy una persona muy risueña, me encanta disfrutar de todo aquello que me hace reír o sonreír. Por eso en mi dieta diaria mental siempre hay sitio para una buena película cómica, un tebeo de Mortadelo y Filemón, un buen chiste o porque no, incluso para dejar un hueco y reírse de uno mismo, pues creo que esto también es importante ya que es una buena forma de control del ego, además esto nos lleva a conectar mejor con nuestra niñez y esencia en general.

Jugar con nuestros hijos o sobrinos o con cualquier otro niño con el que tengamos alguna relación cercana y hacer que te busquen o buscar tú sus cosquillas, sin duda es una tarea que te hará reír, te lo pasarás muy bien y al mismo tiempo ellos disfrutarán de ti y tú de ellos, creando vínculos que son difíciles de olvidar para ambas partes.

Sin embargo, te diré que a pesar de ser alguien tan risueño, alegre y a veces en la intimidad o privacidad hasta un poco payaso la verdad, yo hace algunos años me di cuenta de una cosa y es que cuando me fotografiaban ya sea solo o acompañado, siempre salía en las fotografías con la boca cerrada.

Pronto comprendí que se trataba de un complejo físico que estaba alojado en mi subconsciente.

En mi época, de pequeño, no existían los móviles ni las cámaras digitales, si querías hacerte una fotografía tenías que esperar a que toda la cinta de la cámara estuviese llena (normalmente unas 24 o 36 fotografías) para llevar el carrete a revelar y solo entonces (a veces después de mucho tiempo), veías el resultado de aquel instante que había sido inmortalizado.

Al problema añadido de no poder ver ni comprobar en ese mismo instante el resultado de la fotografía, se le unía el hecho de que muchas fotografías salían veladas, borrosas, etc. y uno olvidaba como se sentía en ese preciso momento.

Así que era difícil en ocasiones valorar causa y efecto.

Hoy en día ese problema no existe, ya que, cualquier smartphone o teléfono de baja calidad lleva incorporada una cámara digital y cualquier persona un poco analítica u observadora puede ver la causalidad.

Y eso mismo es lo que me sucedió a mí, así que en el 2012 decidí dar un paso al frente para empezar a cambiar algunas cosas que no me gustaban de mi sonrisa o en este caso, falta de ella en una fotografía.

Hay unas pocas personas que tienen la gran suerte de nacer con la genética de una dentadura perfecta o casi perfecta, pero reconozcámoslo, la mayoría no disfrutarán de ese privilegio y yo me incluyo entre esos no afortunados.

Si bien es cierto que cada persona tiene sus virtudes y taras, ya sean estas físicas, genéticas, intelectuales o de otra índole, cada cual lleva esto a su manera y unas cosas les influyen más que otras.

Por mi parte yo nunca he envidiado nada de nadie, claro que mentiría si dijese que no pensé muchas veces en si tuviese un poco más de esto o un poco menos de aquello, pero en términos generales, diría que siempre me ha atraído una dentadura “perfecta” y lo pongo entre comillas porque la perfección en si misma no existe, tan solo existe la percepción de que algo tangible o no, así lo sea.

Por ejemplo, para mí, una rosa es una flor perfectamente imperfecta, pues su gran belleza radica principalmente en que cada una de sus hojas es diferente a las demás y eso la hace única y maravillosa.

Es muy difícil que encontremos dos rosas en la naturaleza que sean exactamente iguales. En la imperfección también se haya la belleza, de hecho, hay muchas cosas para mí que son mucho mejor si son imperfectas.

Pero volviendo al tema, supongo que como de pequeño siempre he sufrido acoso escolar por ser un niño gordito con gafas y personalidad un tanto introvertida y reservada, pues el hecho de tener una dentadura con problemas, tampoco me ayudó mucho a la hora de tener más confianza en mí mismo.

Con los años y la madurez este tipo de cosas las vamos superando poco a poco, pero casi siempre este tipo de problemas y complejos tienen raíz en nuestra infancia.

Es una lástima, porque por desgracia la sociedad no tiene suficientes buenos maestros (y no me refiero a los profesores de la escuela), sino a las personas que nos cuidan o que están a nuestro alrededor o a cargo de nuestra enseñanza, que no saben cómo mitigar o paliar esto de forma más efectiva y correcta para que esto no conviva durante tanto tiempo con nosotros y coaccionen en cierto modo nuestra vida y bienestar.   

Pero como podrás leer en una de mis frases y reflexiones:

No hay raíz lo suficientemente profunda, que no pueda ser desterrada

Gustavo Adolfo González Alfaya

Lo que significa que por profunda que esté una herida en tu interior, por más tiempo que lleves arrastrando un problema, siempre vas a poder encontrar una solución si tienes fuerza y voluntad.

Hoy le sonrío a la vida, porque sonreír es importante, la estética es opcional, la funcionalidad es necesaria, pero sentirse bien con uno mismo, eso mi querido lector, NO TIENE PRECIO.

Para terminar, tan solo te quiero decir que no te desesperes, si sufres de algún trauma, tienes algún complejo o quieres realizarte alguna operación de estética, por favor, elige siempre a profesionales cualificados, busca calidad y no precio, porque muchas veces un bajo coste tiene consecuencias irreversibles que te harán pagar un alto precio (y no me refiero solo al económico) No importa cuánto tardes en conseguir lo que quieres, es preferible aguardar un poco más y hacerlo con un profesional de confianza que apresurarme e hipotecar toda una vida.

1, 2, 3, 4, 5, 6, 7, 8, 9, 10, 11, 12, 13, 14, 15, 16, 17, 18, 19, 20, 21, 22, 23, 24, 25, 26, 27, 28, 29, 30, 31, 32, 33, 34, 35, 36, 37, 38, 39, 40, 41, 42, 43, 44, 45, 46, 47, 48, 49, 50

Comenta, comparte, enseña, vive, vuela, sueña
Elige un idioma »
Esta web utiliza cookies propias y de terceros para su correcto funcionamiento y para fines analíticos. Contiene enlaces a sitios web de terceros con políticas de privacidad ajenas que podrás aceptar o no cuando accedas a ellos. Al hacer clic en el botón Aceptar, acepta el uso de estas tecnologías y el procesamiento de tus datos para estos propósitos. Ver
Privacidad