El arrepentimiento

El arrepentimiento

Arrepentimiento, una simple palabra que podríamos definir como la acción de tomar consciencia del daño que nosotros hemos causado con nuestros actos y decisiones sobre otro ser vivo, sobre uno mismo o incluso, sobre algo que podría ser inerte y lo cual nos hace sentir mal o nos hace sentir culpables.

Seguro que todos podemos identificar alguna situación o hecho de nuestras vidas del cual no nos sentimos orgullosos, algo que seguramente nos bombardea en nuestra mente una y otra vez diciendo, ¡ojalá pudiese volver atrás y ojalá pudiese cambiar eso que hice o que dije en su momento!

Yo estoy convencido, un sentimiento de arrepentimiento bien aplicado puede ser más poderoso que cualquier arma atómica que se pueda fabricar.

Las armas matan a mucha gente y destruyen todo cuanto hay a su alrededor, pues están diseñadas y fabricadas precisamente para eso, para hacer daño y para destruir.

El problema de las armas es que engendran violencia, odio y rencor y este normalmente perdura en el tiempo, sin embargo, el arrepentimiento coge el daño ya causado e intenta corregirlo de alguna forma.

El verdadero poder no está en cambiar el orden de las cosas, sino en hacerlas mejor.

Gustavo Adolfo González Alfaya

Seguramente tú también te arrepientes de algo que has dicho o hecho en tu vida al igual que yo, y es muy posible que no puedas hacer nada por cambiar aquello de lo cual te arrepientes, pues ya no hay vuelta atrás como se suele decir, lo hecho, hecho está, pero lo que también está claro, es que la huella que ha dejado ese sentimiento en ti lo cambia todo.

Como acabo de decir, hay circunstancias  y situaciones en las que el daño causado ya no se puede enmendar o corregir, sin embargo, el arrepentimiento nos deja una gran lección para el resto de nuestras vidas, una lección que nos enseña lo que no debemos de volver a hacer y también, nos deja un sentimiento muy valioso con el que de alguna forma, nos induce a hacer el bien para curar esas heridas que hemos provocado.

Si en un futuro la humanidad llega a tomar consciencia de sus actos y repercusiones, es decir, si se llega a arrepentir de todo lo que hoy hace mal, es muy posible que las cosas cambien y lo hagan para bien.

En cualquier caso, lo primero que debemos de hacer al arrepentirnos de algo, es pedir perdón.

Pedir perdón a uno mismo para poder estar en paz con nuestro yo interior y después hacerlo con los demás, porque en muchas ocasiones seremos víctimas de las circunstancias que nos rodean, antes de convertirnos en verdugos de los demás.

Puede que en alguna ocasión hayamos hecho o dicho algo que ha estado mal o muy mal y de lo cual nos arrepentimos profundamente, algo que sabemos que no hemos obrado bien y que si pudiésemos, cambiaríamos al instante sin pensarlo ni un solo segundo.

Pero también es cierto, que si nos tomamos el suficiente tiempo para analizar y reflexionar sobre alguna de esas cosas de las cuales sentimos arrepentimiento, descubriremos con asombro que no siempre hemos sido verdugos, sino que incluso alguna vez, hemos sido las víctimas de las circunstancias que nos llevaron hasta ahí.

Yo me arrepiento de muchas cosas que hice mal durante mi vida, la mayoría durante mi niñez o adolescencia y alguna aislada durante mi etapa de adulto.

Curiosamente, he cargado en mi espalda las más viejas y las más pesadas hasta el 2013, momento en el que descubrí a través de la introspección y la reflexión, que aunque había obrado mal en su día, yo fui víctima y no verdugo.

Descubrir esto fue un peso tremendo que me saqué de encima, fue como deshacerme de una mochila muy pesada que había arrastrado durante demasiados años.

Esto no hace que olvide lo sucedido o que no tenga la certeza de que actué mal, pero en lo que sí me ayudó fue a entender el por qué lo hice así.

El arrepentimiento es como una cárcel sin rejas, puedes ir a donde quieres, pero allá a dónde vas, siempre te sientes preso de tus sentimientos y emociones.

Creo que hay mucha gente en cárceles de verdad, que no saben lo que es un castigo, por eso muchos cuando salen vuelven a hacer aquello que los llevó hasta allí, por eso creo que no hay castigo sin arrepentimiento ni arrepentimiento sin castigo.

Te voy a decir una cosa, arrepentirse es algo muy bueno, es algo que te enseña a un nivel muy profundo y te deja unas cicatrices que son difíciles de olvidar. Esas enseñanzas que vienen implícitas con el arrepentimiento permanecerán contigo por el resto de tu vida.

Además, el hecho de tomar consciencia de los actos de uno mismo y arrepentirse de lo que hacemos mal, es el primer paso para ascender a un estado superior, donde el ego, no es el protagonista de esta película, sino que lo eres tú y tu verdadero ser.

Por otro lado, el aprender a perdonarse y perdonar a los demás, es la vía necesaria para que todos podamos vivir en paz y felicidad.

Espero que estas palabras te ayuden a ver y comprender que el arrepentirse de algo profundamente y pedir perdón, habiendo aprendido la lección de no volver a cometer ese mismo error, es la antesala para convertirse en una mejor persona y en un mejor ser humano. Si estás arrepentido/a de algo que sabes que eres culpable y llevas esa mochila pesada en la espalda desde hace tiempo, te recomiendo que hagas primero las paces contigo mismo/a para perdonarte y después, lo hagas con aquello o aquellos a quien les has hecho de alguna forma daño para poder evolucionar y ser así mejor persona de lo que eras antes.

1, 2, 3, 4, 5, 6, 7, 8, 9, 10, 11, 12, 13, 14, 15, 16, 17, 18, 19, 20, 21, 22, 23, 24, 25, 26, 27, 28, 29, 30, 31, 32, 33, 34, 35, 36, 37, 38, 39, 40, 41, 42, 43, 44, 45, 46, 47, 48, 49, 50

Comenta, comparte, enseña, vive, vuela, sueña
Elige un idioma »
Esta web utiliza cookies propias y de terceros para su correcto funcionamiento y para fines analíticos. Contiene enlaces a sitios web de terceros con políticas de privacidad ajenas que podrás aceptar o no cuando accedas a ellos. Al hacer clic en el botón Aceptar, acepta el uso de estas tecnologías y el procesamiento de tus datos para estos propósitos. Ver
Privacidad