Evolución

Evolución

Hay personas que no consiguen avanzar en la vida, porque son incapaces de distinguir entre su pasado, su presente y su futuro. Es decir, no saben de dónde vienen, dónde están y hacia dónde quieren ir. En otras palabras, no saben quiénes son, qué es lo que hacen ahora y a dónde les conducirá su vida por el camino actual.

Por norma general muchas personas piensan que lo que hacen, es lo que son y lo que probablemente serán en un futuro, pero las personas que creen en esta afirmación se han condicionado a si mismas limitando su gran potencial de crecimiento y obviando algo tan importante para el ser humano como es la propia evolución.

Evolución es el sinónimo de varias palabras juntas: cambio, transformación y adaptación.

Todos los seres vivos de este planeta han pasado por este proceso desde el comienzo de los tiempos y seguirá siendo así en la posteridad.

Sin embargo, estos cambios no son solo estéticos o superficiales, no son solo físicos tampoco, el mayor de estos cambios se produce principalmente en nuestra mente y a partir de ahí, evolucionamos como necesidad a la transformación de nuestro entorno.

Hay personas que se aferran al pasado, se aferran a un trabajo, a una casa, a unas condiciones o incluso, hasta a un clavo al rojo vivo.

Esto sucede normalmente porque tienen miedo a evolucionar y prefieren seguir quemándose aunque sea poco a poco a dar un paso al frente y descubrir que es lo que hay fuera de ese tarro de formol en el que están metidos.

Un ser humano no ha nacido para estar dentro de un tarro, por lo tanto, ¿para qué quedarse a vivir dentro de él?

No importa cuál sea tu estado evolutivo actual, siempre existe un margen de mejora sobre el que poder trabajar.

En una ocasión escuche decir a alguien que no quería dejar de hacer lo que estaba haciendo porque eso le había ayudado a convertirse en la persona que era ahora. Lo curioso de este caso es que si bien en parte esto era cierto, la realidad es que lo que le estaba haciendo crecer, era lo mismo que le estaba quemando.

El consejo que le di a esta persona fue que lo dejara todo, porque siempre hay más opciones de crecimiento, pero de nada sirve crecer si al final terminas en llamas por no soltar lo que te quema.

Te pondré un caso hipotético, imagínate que eres un comercial sin experiencia que entra a trabajar en una empresa como autónomo asociado.

Al principio como parte de la filosofía de formación de la empresa esta te da unos recursos con los que aprender más sobre el trabajo que tienes que desempeñar allí, como ser más productivo para conseguir más comisiones por ventas e incluso, algunas cosas valiosas que te pueden servir en tu vida diaria.

Tras un tiempo considerable trabajando para esta empresa has visto como tu vida en general ha ido en detrimento y tu crecimiento personal ha ido en aumento.

Llega un momento en el que hay que poner en la balanza todos los pros y todos los contras y ver hacia qué lado se inclina para saber que debemos hacer.

Puede que esta empresa te haya hecho crecer en algunos aspectos, pero al mismo tiempo te está hundiendo en muchos otros, tal vez lo justo sería decir que no necesariamente tiene que ser culpa de la empresa, es probable que quizás seas tú quien no tiene todas las cualidades, habilidades o aptitudes necesarias para alcanzar el éxito dentro de ella.

Como todo en la vida, el equilibrio es lo que determina siempre la mejor opción a elegir.

Aferrarse a algo se llama apego y donde hay apego, no hay evolución.

Tal vez esa empresa sea maravillosa, pero no lo está siendo para ti y si lo que uno busca son herramientas y recursos de los cuales aprender y seguir creciendo, el mundo está lleno de opciones donde elegir sin que por ello, tú tengas que quemarte.

A veces evolucionar es solo una cuestión que implica una toma de decisión o elección. Tomar decisiones también es una forma de evolución y las decisiones que no tomes tú, las tomarán posiblemente otros por ti o será la propia vida quien se encargue de hacerlo, en cualquier caso, siempre hay al menos dos opciones, pero elegir la correcta depende única y exclusivamente de ti.

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